Mercasevilla confirma que el marido de la juez Alaya no auditó el 2002

La última auditoría en la que intervino la empresa KPMG corresponde al ejercicio de 2001, con lo que no interfiere la investigación planteada por la instructora

Jorge Muñoz

22 de noviembre 2010 - 14:07

La empresa Mercasevilla ha confirmado que el último ejercicio que auditó la empresa en la que trabaja el marido de la juez Mercedes Alaya fue 2001, con lo que en principio la labor del cónyuge de la magistrada no interfiere la investigación que desarrolla el juzgado de Instrucción número 6, que en un auto acotó la investigación desde septiembre de 2002, fecha en la que fue nombrado gerente de Mercasevilla Fernando Mellet, principal imputado en la causa.

La magistrada Auxiliadora Echávarri, que instruye la recusación presentada por una de las defensas contra la juez Alaya, pidió expresamente a Mercasevilla que concretase las fechas de las auditorías que realizó la empresa KPMG, en la que trabaja el marido de la juez Mercedes Alaya, así como los serviios de auditoría prestados por su su marido durante el ejercicio contable y fiscal de 2002.

La respuesta del Mercado Central de Abastos certifica que KPMG realizó las auditorías de los ejercicios económicos entre 1998 y 2001, y que la opinión de la auditoría sobre este último año tiene fecha de 4 de junio de 2002.

Lo paradójico de los datos ahora aportados por Mercasevilla es que esta información contrasta con la posición que esta sociedad ha adoptado en torno a la recusación de la juez Alaya. Aunque el escrito presentado por Mercasevilla destacó la labor "rigurosa y fundada" de la magistrada en la investigación de las presuntas irregularidades relacionadas con el mercado central de abastos, la empresa acabó por acatar una hipotética recusación de la magistrada.

El esposo de la juez Alaya "tuvo un trato personal con los imputados", entre los que se encuentran la directora económica de Mercasevilla, Pilar Giraldo, por lo que "de ser ciertos los hechos que se recogen en el escrito de propuesta de recusación, la misma pudiera prosperar, pues puede entender que indirectamente existe una motivación o al menos conocimiento previo de la actuación de los querellados en Mercasevilla". Continuando con este argumento, la representación jurídica del mercado mayorista precisa que la propia instructora "debería analizar el trabajo realizado por el cónyuge, por lo que igualmente puede considerarse vinculada al mismo objeto del procedimiento o, al menos, a soportes probatorios sobre los cuales pudiera fundarse una hipotética sentencia condenatoria".

La Fiscalía de Sevilla se adhirió a la recusación de la juez al considerar que aunque la magistrada afirmó que sólo investigaría desde septiembre de 2002, desde el punto de vista contable y de auditoría no era posible analizar los datos de una parte del año, sino que habría que examinar todo el año 2002, con lo que en ese supuesto sí se podría ver afectada la "imparcialidad" de la juez por el trabajo de su marido.

Esta posición del departamento que dirige María José Segarra se produjo tan sólo dos semanas después de que el Ministerio Público anunciara que no había motivos para apartar a Mercedes Alaya de la investigación, una vez que la defensa presentó un escrito en el que insinuaba que podía haberse producido una causa de recusación por la labor auditora que su marido había desempeñado en Mercasevilla hasta 2002.

La magistrada de la Audiencia de Sevilla Auxiliadora Echávarri debe ahora remitir el expediente, acompañado de su propuesta de resolución sobre la recusación, a otra Sección de la Audiencia Provincial para que resuelva definitivamente sobre si Mercedes Alaya debe continuar investigando la tercera línea abierta por delitos societarios en Mercasevilla y en la que se podrían incluir las últimas revelaciones sobre la inclusión en los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) de 2003 y 2007 de personas ajenas a la sociedad.

2 Comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último