tribuna de opinión
José Ángel Saiz Meneses
Navidad: el encuentro que salva
La botellona regresa al centro con el inicio del curso. La primera fiesta universitaria de la temporada no se ha hecho esperar. La Plaza del Salvador se llenó ayer de centenares de jóvenes con botellas y latas de alcohol en una celebración que se prolongó durante varias horas de la tarde y de la noche, a pesar de que la Policía Local acudió en varias ocasiones para tratar de disuadir a los jóvenes. La fiesta se desarrolló desde el mediodía en distintos lugares de la ciudad, como los Jardines del Valle, donde hubo otra concentración, pero con la caída de la noche, la mayoría se dirigieron al Salvador, lugar en el que habían quedado a través de las redes sociales.
La mayoría de los chavales, muy jóvenes, pertenecían a distintos colegios mayores de la ciudad y habían quedado para la fiesta de los novatos. El atuendo ya delataba las intenciones de la concentración: caras pintadas, algunos en pijama y casi todas las chicas con la ropa interior por fuera. A las 20:00, la concentración en el entorno del Salvador y la Alfalfa se hacía cada vez mayor, por lo que varios vecinos llamaron al 112 para alertar a los servicios municipales. En 10 minutos, según relataron varios testigos, la Plaza del Salvador fue tomada por varios patrulleros de la Policía Local y varias cuadrillas de Lipasam para retirar los restos de la botellona. Hasta la zona también se desplazó Demetrio Cabello, delegado de Seguridad del Ayuntamiento de Sevilla. La presencia policial surtió efecto en un primer instante y los jóvenes se dispersaron, pero a los pocos minutos volvió a llegar una nueva oleada de universitarios con ganas de fiesta. Las proclamas que lanzaban a los cuatro vientos, daban buena cuenta de su procedencia: "Se nota, se siente, la Luz [colegio mayor] está caliente". "Somos las sagradas". "Trinitarias, trinitarias". Además de otras lindezas que se dedicaban entre ellos. Los turistas, alucinados, preguntaban qué estaba pasando. "Estamos haciendo novatadas, no nada malo".
La Policía volvió a la plaza con más agentes que antes. Parecía que con intención de echar a los jóvenes que seguían con sus proclamas al viento. Tras unos minutos en la plaza, al filo de las 21:00, se marcharon. Los jóvenes pudieron continuar con la fiesta.
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