Los prejubilados del ERE de 2007 están cobrando mediante préstamos

Los 40 prejubilados de Mercasevilla cobran desde el pasado mes de enero gracias a "contratos de préstamo" que les hace firmar la empresa y en los que se hace constar un compromiso de reintegro del importe y sin que suponga un "reconocimiento" de derechos adquiridos, tal como denunció ayer el grupo popular, que consideró "aberrante y humillante" esta práctica. Estos prejubilados se acogieron al polémico ERE de 2007, cuyo importe se niega a asumir la Consejería de Empleo. El concejal del PP y consejero de esta sociedad Beltrán Pérez exhibió ayer la copia de uno de estos "contratos de préstamo". En el documento figura la firma del nuevo director general de Mercasevilla, Juan Carlos Recio, y se relata que la póliza suscrita por la empresa y el Banco Vitalicio confiaba el pago de las nóminas correspondientes a las prejubilaciones del ERE de 2007 "proporcionalmente" a la propia compañía y a la Consejería de Empleo, "tal como se hizo en el anterior expediente de regulación de empleo de 2003", según reza en el texto. La Consejería de Empleo ha rechazado públicamente su participación en la financiación de estas prestaciones, cuyo coste supera los nueve millones de euros.

El documento refleja también el "incumplimiento" de la Junta de Andalucía por lo que a este "compromiso" se refiere, lo que motiva, según el documento, que el Banco Vitalicio no abone a los prejubilados las prestaciones correspondientes a cada uno de los meses para los que rige esta fórmula de pago. Por este motivo, los contratos de préstamo en cuestión entregan a los prejubilados sus percepciones precisamente en concepto de "préstamo" concedido por Mercasevilla, lo que incluye el "compromiso" de reintegro de las cuantías percibidas, además del reconocimiento de la ausencia de "derechos adquiridos" por lo que a las relaciones que dichos documentos recogen.

El trabajador se ve obligado a renunciar "al derecho a exigir próximos préstamos" por parte de Mercasevilla e incluso desiste de emprender "reclamaciones" ante la empresa por las partidas impagadas, dado que atribuye la obligación de abonar las nóminas precisamente al Banco Vitalicio". Estos contratos de préstamo, según Beltrán Pérez, constituyen "una indignidad, un atropello y una auténtica humillación" para el colectivo de prejubilados del ERE de 2007. El portavoz adjunto del PP consideró que esta fórmula es manifiestamente "abusiva y lesiva" para los prejubilados, pues entre otras cosas establece la "obligación" de reintegrar las cuantías prestadas, además de "la renuncia mensual a los vínculos jurídicos de estos trabajadores con la propia Mercasevilla".