La tropa de Lopetegui tira de físico como premisa para mucho más
El partido del Sevilla | Análisis
Primero, agresividad arriba con la turbina de Ocampos, luego, a armarse atrás con Koundé, Diego Carlos y Fernando
La calidad física y táctica de este Sevilla lo llevó a tomar altura con celeridad en el inicio de la temporada, y después de 93 días sin fútbol de Primera División en España, el cuajado equipo de Julen Lopetegui demostró en el derbi que mantiene su solidez como colectivo. En dos fases lo hizo. La inicial para poner el partido de cara, con Ocampos como turbina que generaba buena parte del caudal de energía –con Fernando dirigiendo la presión desde atrás– y una segunda, ya con 2-0, con Koundé y Diego Carlos plantando sus reales en el área de Vaclík.
Defensa
Fekir cayó a la derecha en busca de una conexión con Emerson desde la banda o alguna irrupción de Canales o Aleñá por dentro, pero a los verdiblancos les costó engarzar juego desde atrás en situaciones estáticas y en las contras el repliegue sevillista, con Fernando como jefe, fue rápido y eficaz.
Sólo en una ocasión Fekir recibiö el balón en ventaja y en zona de peligro, pero su control fue un tanto largo y Diego Carlos se lanzó como un felino a sus pies para cortar. Munir, y puntualmente Ocampos, echaron una mano a Reguilón en su costado, como el argentino a Navas en la derecha: sólo una vez pisó Álex Moreno el área en disposición de rematar. Y por dentro, apenas una incursión de Canales resuelta con tiro muy alto (38’). Fue el primer remate del Betis.
Con el 2-0 y los cambios de Rubi, Lainez abrió un agujero junto a Fekir y Emerson en la zona de Reguilón. Ya con Escudero y el Mudo ayudando algo, el Sevilla respiró.
Ataque
La superioridad del Sevilla en la medular fue manifiesta. Guido, Aleñá y Canales sucumbieron en las disputas y el Sevilla empezó a abrir el juego, más por la izquierda en aperturas a Munir o desdoblamientos de Reguilón. Pero el peligro franco era de Ocampos.
Tras el descanso, la línea de presión subió aún más hasta que llegó el discutido penalti y poco después el improvisado taconazo de Ocampos que aprovechó Fernando.
Virtudes
El Sevilla es un equipo con una columna vertebral férrea y las ideas muy claras como colectivo.
Talón de Aquiles
Las entradas de Banega, En-Nesyri y Suso no le dieron salida al equipo cuando el Betis apretó ya de verdad.
Los jugadores del Sevilla, uno por uno
Vaclík Apenas exigido. Discreto con los pies, como suele.
Jesús Navas Se soltó poco en ataque, pero resolvió con su experiencia atrás.
Koundé Imponente su partido en cortes, anticipación, limpieza para sacarla y peligro en sus numerosas subidas. Falló un gol clarísimo al saltar mucho y quedarle el balón abajo.
Diego Carlos Otro que jamás se dejó ganar el terreno. Muy atento ante Fekir. Buenos balones largos, que se frenan al botar.
Reguilón Insistente, pero muy atropellado. Y Lainez lo desnudó.
Joan Jordán de más a menos, acabó muy cansado.
Fernando La pieza que da cohesión al grupo. Jamás pierde el sitio. Buen gol, hábil en un cabezazo forzado.
Óliver Torres Apareció por muchas zonas, aunque algo irregular en los pases.
Ocampos Un torbellino imparable, que no se ahorró un solo esfuerzo a pesar de su delicada situación física. Enorme en los penaltis.
De Jong Puede no gustar su fútbol, pero fue irse y el Betis dar un paso adelante.
Munir Movilidad y calidad para aguantarla, recortar y sacar buenos centros desde la izquierda.
Banega Apenas dio salida.
En-Nesyri Un tanto frío.
Suso Un tiro envenenado que fue desviado.
Escudero Con sus tablas, frenó el ímpetu de Lainez.
Franco Vázquez A aguantar la pelota y desahogar.
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