La aldaba
Carlos Navarro Antolín
El acierto de cobrar dos euros
Las garrapatas son la nueva alerta sanitaria en nuestro país, ya que en años recientes se ha llegado incluso a triplicar la tasa de hospitalizaciones a causa de enfermedades transmitidas por este ácaro, con la alarmante cifra de 1.865 pacientes hospitalizados entre 2005 y 2019.
A su vez, existen alrededor de 20 subespecies de garrapata en territorio español, y muchas de ellas transmiten enfermedades extremadamente peligrosas. Por ello, con fin de ayudar a la ciudadanía a detectar casos de dichas enfermedades, las autoridades sanitarias han compartido algunas de las enfermedades transmitidas por garrapatas y sus síntomas. Si has sufrido una de estas picaduras y sufres síntomas que coinciden con estas descripciones, es de vital importancia que busques asistencia médica urgente para evitar problemas mayores en tu organismo.
Aunque la especie Dermacentor andersoni, la cual provoca estos síntomas, habita mayormente en Estados Unidos y Canadá, es importante saber identificarla por si hemos visitado alguno de estos países recientemente. Sus síntomas son los siguientes:
Esta patología la causa una bacteria llamada Borrelia burgdorferi. Dicha bacteria suelen portarla las garrapatas de patas negras o garrapatas del venado, aunque no todas las especies de garrapata sean portadoras de ella. Sólo podremos contraer esta enfermedad si nos pica una garrapata infectada con la bacteria previamente mencionada. Esta es su sintomatología:
Una vez más, tratamos una patología especialmente común en los Estados Unidos y el continente americano en general. Esta la transmiten las especies Rickettsia rickettssii, Dermacentor andersoni (conocida como garrapata de la madera) y la garrapata común de perro, entre otras. Sus síntomas identificados, aunque no todos se dan en todos los casos, son los siguientes:
Si bien también puedan transmitirla garrapatas, mosquitos y moscas, esta infección bacteriana se suele presentar en roedores salvajes, que la transmiten a seres humanos mediante el contacto con sus tejidos. Estos son algunos de los síntomas de la tularemia, transmitida por la bacteria Francisella tularensis:
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