Aunque la plantilla del Betis está centrada en el objetivo europeo, tras la dinámica positiva obtenida en este 2021, el club sí trabaja ya en la planificación del próximo año, en el que será necesario continuar con los ajustes económicos para cuadrar los balances, que tendrá en su base la utilización de la cantera y la llegada de futbolistas de bajo coste.

El Betis tiene esta temporada sobrepasado el tope salarial marcado por LaLiga, a la vez que necesita la obtención de plusvalías para cuadrar las cuentas, de ahí que el club venga realizando un seguimiento intensivo a los jugadores del Betis Deportivo que pueden dar un salto al primer equipo –Yassin Fekir ya lo hizo en enero–, a la vez que los técnicos vienen peinando el mercado de jugadores libres para la próxima temporada, una cuestión que ya se aplicó la pasada campaña cuando llegaron Claudio Bravo, Víctor Ruiz, Miranda o Montoya bajo esta modalidad.

Ahí surgen nombres como el del centrocampista Dorukhan Tokoz y el defensa Luis Abram, que acaban su contrato en el mes de junio y que llegarían con la carta de libertad. El turco, que tiene ya una propuesta del Betis encima de la mesa, no renovará con el Besiktas y, según el presidente del club turco, tampoco firmará por un club de su país.

Toköz, en un encuentro con el Besiktas.

El caso de Abram es similar, ya que el central peruano no ha querido renovar hasta el momento su contrato con Vélez Sarsfield, de ahí que en Argentina se vincule su nombre con el Betis, que ya lo tuvo en su agenda la pasada temporada. Pese a todo, el nombre de Abram no es el único que se manejaría en la secretaría técnica verdiblanca.

También tienen muy en cuenta los técnicos a jugadores cedidos esta temporada como Robert en la Unión Deportiva Las Palmas y Édgar en el Oviedo. Ambos jugadores están teniendo un crecimiento muy positivo, aunque la última palabra la tendrá el entrenador durante la pretemporada. Lo mismo ocurrirá con otros jóvenes como Rodri, que lleva casi todo el año trabajando con la primera plantilla, Fran Delgado, Geovanni o Raúl, habituales en los entrenamientos del primer equipo. También está el caso de Luis Martínez, un jugador de una edad impropia en un filial y al que los técnicos vienen realizando un seguimiento intensivo por si se decidiera incorporarlo al primer equipo la próxima temporada, lo que también disminuiría la necesidad de fichar a un central.

Ángel Haro en el Benito Villamarín

Este plan diseñado por el club verdiblanco puede encontrar ingresos añadidos si finalmente el equipo sella una clasificación europea –la Europa League sería más interesante que la Conference League–, y también con la posibilidad de que se produjera una gran venta que dejase plusvalías, lo que permitiría acudir al mercado en busca de un refuerzo que supusiera un mayor coste del previsto inicialmente.

Dentro de esa política de ajustes también se enmarca la negociación abierta para rebajar los salarios de la primera plantilla –a semejanza de lo que ha hecho el Athletic–, pero también las conversaciones que el club ya viene realizando con algunos jugadores para ajustar sus contratos –aumentar los años de vinculación a cambio de una rebaja salarial– y que se definirán caso a caso según las condiciones de cada uno.

El desfase de más de 30 millones en el presupuesto de este año obliga a tomar medidas de ajuste, pero también a un plan de cantera y de bajo coste para la próxima temporada.