Hasta 194 viviendas ha adjudicado Emvisesa por la vía de urgencia a familias vulnerables y en riesgo de exclusión social durante el mandato de Juan Espadas. Ésta es una de las principales conclusiones que aparecen en el informe de gestión de una empresa municipal de vivienda que ha destinado casi 2,5 millones de euros para ayudar a los sevillanos con menos recursos y que trabaja en un estudio para establecer un índice de precios de referencia de alquiler para impedir la proliferación de rentas abusivas. El ejercicio de 2018 cerró con una bajada del endeudamiento hasta los 82,4 millones y un beneficio de 982.055 euros. Durante este año van a ejecutarse 18 proyectos confinanciados con fondos europeos que suman un presupuesto de más de 100 millones.
Al comienzo de la pasada legislatura, los socialistas detectaron un gran número de familias afectadas por la crisis económica que no contaban con alojamientos o estaban en riesgo de perderlo. En estos cuatro años Emvisesa ha concedido 194 viviendas a estas personas en riesgo de exclusión social. El apoyo a las familias con menos recursos se ha traducido en un gasto de 2.494.970 euros. Estas abonan una renta mínima que habitualmente son de 25, 45 o 75 euros.
La clasificación por distritos de las solicitudes en los programas de ayuda para las familias con pocos recursos durante el año pasado está encabezada por el centro de servicios sociales de San Jerónimo con 176 expedientes tramitados y una deuda de 669.196 euros. Le siguen los centros de Alcosa-Sevilla Este con 111 expedientes y 890.742 euros; Torreblanca con 53 expedientes y 372.989 euros; Tres Barrios-Amate con 44 expedientes y 150.235 euros; Norte Los Carteros con 35 expedientes y 176.043 euros; Bermejales con 17 expedientes y 40.272 euros en deuda; Casco Antiguo con tres expedientes y 11.538 euros; y Triana-Los Remedios con un expediente.
El endeudamiento se reduce a 82,4 millones y el beneficio llega a los 982.055 euros
Los grupos políticos acordaron, en una sesión plenaria celebrada en octubre del año pasado, encargar a Emvisesa la elaboración de un Índice de Precios de Referencia para el Alquiler (IPRA) con el objetivo de dotar de transparencia al mercado e impedir la proliferación de precios abusivos. Los técnicos ya elaboran esa lista con el fin de constituir un marco de referencia que servirá a los inquilinos para saber si la renta que les solicitan por un alquiler está en cifras de mercado. También será una herramienta útil para los propietarios, ayudándoles a fijar precios realistas y ajustados a la realidad de Sevilla.
Tanto los precios como los criterios de elaboración se actualizarán y revisarán periódicamente. El programa de alquiler asequible también se servirá de esta referencia, así como todas las medidas que se incorporen dentro de las competencias municipales que establezca la nueva normativa estatal para impedir precios abusivos de alquiler.
El informe de gestión de la empresa municipal detalla que durante el mandato de Juan Ignacio Zoido se vendieron 1.162 viviendas y alquilaron 674. En 2014 y 2015 las adjudicaciones se fueron desacelerando hasta detenerse, dejando a Emvisesa con un total de 291 pisos libres. A 15 de marzo de 2019, la empresa ha alcanzado la cifra de 853 viviendas protegidas adjudicadas a las familias que cumplen los requisitos exigidos.
La ciudad dispone de un parque público de viviendas protegidas en alquiler de 7.029 viviendas (2.795 de Emvisesa, 3.634 de AVRA y 600 de Patrimonio). Esto se traduce en que alcanza una ratio de habitantes por vivienda protegida en alquiler que mejora considerablemente la de Barcelona y, muy especialmente, la de Madrid. En Sevilla hay 98 habitantes por viviendas protegida en alquiler, en Madrid 532 y en Barcelona 143.
Durante la actual legislatura se han cedido 20 nuevas viviendas, duplicando la cesión de viviendas a entidades sin ánimo de lucro respecto al total histórico. Estas asociaciones trabajan para facilitar la integración socio laboral de personas con discapacidad intelectual o trastornos del espectro autista; inmigrantes y refugiados; y personas en riesgo grave de exclusión social, como los jóvenes sevillanos sin recursos.
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